El bien como principio de la acción divina creadora en la metafísica de Tomás de Aquino

Autores/as

  • Luis E. LARRAGUÍBEL DÍEZ

Palabras clave:

Bondad, Creación, Causalidad, Dios, Libertad

Resumen

Siguiendo a Dionisio Areopagita, el Aquinate enseña que el bien es el principio común de todas las procesiones divinas, es decir, todo aquello que Dios comunica a las creaturas es por su bondad: de allí que desde el punto de vista de la causalidad, el nombre más propio que le corresponde a Dios es el de Bonum. Por lo tanto, y de acuerdo al principio operari sequitur esse, si la naturaleza divina es buena, lo que necesariamente procede de ella ad extra (creación), es bueno. La bondad de la naturaleza divina es explicitada por Santo Tomás cuando retoma las palabras dionisianas acerca del bonum est diffusivum sui, pero aclara su sentido en razón de la primacía de la causa final: si Dios obra ad extra es primero por amor de Sí (se contempla y se ama a Sí mismo) y, luego de esta actividad, obra sin necesidad. Según la Revelación, la bondad divina no sólo se difunde de modo común en la creación, sino íntimamente debido a la predestinación de la creatura intelectual conforme fieri imaginis Filii sui.

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Publicado

2021-03-16 — Actualizado el 2022-08-20

Versiones

Cómo citar

LARRAGUÍBEL DÍEZ, L. E. (2022). El bien como principio de la acción divina creadora en la metafísica de Tomás de Aquino . Estudios Filosóficos, 68(197), 67–79. Recuperado a partir de https://estudiosfilosoficos.dominicos.org/ojs/article/view/1349 (Original work published 16 de marzo de 2021)

Número

Sección

Artículos